La realidad demuestra que aquellos restaurantes que nos son críticos con su negocio van a ser excluidos. La hostería está siendo un sector que también está siendo golpeado por la crisis (Ley antitabaco, bajada de consumo, subida de IVA, etc.). Esta crisis ha vuelto más exigente al consumidor y ya no vale todo. El cliente es cada vez más selectivo y busca un precio competitivo, además de una experiencia agradable y diferente. Por lo tanto, la gestión del negocio de la hostelería ha cambiado porque el escenario ha cambiado: es preciso que los restaurantes se renueven, innoven y adapten a las nuevas formas de hacer negocio. Pero sobre todo tienen que invertir en tener una buena comida, sea tradicional, regional, vegetariana, internacional, de autor, etc. Las bases de la materia prima y más allá del plato (producto final) no solo tienen que ser excelentes, sino que tienen que aportar valor diferencial, es decir, bien tienen que evocar sensaciones de la infancia, bien sorprendernos por el sabor, por la originalidad, por la presentación. Si no añadimos al producto un valor diferencial estamos perdidos ya que seremos uno más y no crearemos valor de marca , por lo que no nos diferenciaremos de la competencia.
¿Por qué hoy nos cuesta tanto comer bien? Porque hay un problema de identidad gastronómica. Si analizamos las cartas de los restaurantes la mayoría ofrecen lo mismo, se rigen por las modas y no se preocupan de crear una marca personal. La ensalada de queso cabra está muy bien pero ¿podríamos ser un poco más originales?. Parece que en las cartas cabe todo, desde un cocido que podríamos catalogarlo como un plato tradicional hasta un tartar que podríamos catalogarlo como un plato internacional, o una hamburguesa que entraría en el fast-food. Una buena carta sorprendente y equilibrada, es la clave del éxito como os iré comentando en mis siguientes post, lo que en marketing on line llamaríamos tener un buen landing page para cubrir la propuesta de valor. Cuidado, inicialmente apostaremos por un carta sorprendente y reducida pero que cubra un propuesta de valor y especializada.
El posicionamiento, es decir, la localización física de un restaurante tradicionalmente ha sido clave para que un restaurante fuera rentable. En la nueva era digital, esto ha cambiado y aunque la localización física de un restaurante ayuda, no es suficiente y cobra una gran fuerza la localización de un restaurante en Internet. Google manda, y también en restauración. Tener una buena posición en los buscadores o lo que en marketing digital llamamos tener una buena estrategia SEO, va a ser necesario en cualquier negocio y en lo que se refiere a la hostelería también. Para dar este paso al marketing digital es preciso que empecemos con la creación de una web de nuestro negocio, lo que nos ayudará en nuestra visión comercial y de gestión empresarial.
Una de las aportaciones que más me gusta del marketing digital en la gastronomía es el aterrizaje de las redes sociales. Aunque todavía estamos en una fase inicial esto ya es imparable. Hoy el cliente si no se siente satisfecho no solo no repite (marketing de fidelización) si no que escribe una mala opinión en una web tan conocida como Tripadvisor (con más de 150 millones de usarios al mes). Por lo tanto en un sector en el que la actitud ha sido algo déspota porque todo valía y además te podían cobrar lo que querían, ahora se requiere un cambio de actitud. Los hosteleros tendrán que entablar relaciones con los usuarios através de las redes sociales, y trabajar su reputación en la web.
Completamente de acuerdo, veo cerrar restaurantes contínuamente, pero curiosamente son los mediocres. Gran iniciativa, muy interesante.
La verdad es que es un negocio que está en continuo cambio en donde se cierran y abren muchos negocios.
Normalmente es verdad que son los mediocres, en lo que se refiere a la cocina o/y en lo que se refiere a la gestión del negocio y marketing, los que terminan cayendo.
Pero también por desgracia se cierran muchos restaurantes por jubilación y por cambio de modas o tendencias perdiendo por el camino grandes restaurantes .
estoy totalmente de acuerdo hay que marcar la diferencia. y los pequeños detalles se nota la diferencia. Si a esa ensalada de queso de cabra le añades 2 cosas diferentes ya has conseguido darle la vuelta al plato y llamar la atención del cliente.
La innovación y la creatividad es fundamental hoy en día. Y más ahora con la crsisis tan salvaje que estamos sufriendo, hay que reinvertarse día a día.
Maite dice el cambio que le has dado a la pantalla me gusta muxo. estoy de acuerdo con que el marketing tiene que entrar en la cocina
estoy de acuerdo, y pienso que un gran problema es el intrusismo desmesurado que ahora existe, cualquiera con un poco de dinero y con toda la familia en paro se lanza a abrir un restaurante y hacen mucho daño a los buenos hosteleros.
Estoy preparando un post acerca del instrusismo de famosos en el sector de la hostelería, principalmente actores, no solo en España sino en todo el mundo ya que es un ejemplo claro de lo que dices.
Cuando lo termine te lo haré llegar la primera. Gracias Mercedes por seguirme.